El SII extendió hasta diciembre el plazo que permite a las sociedades no consideradas profesionales regularizar su situación y así acceder a la exención de IVA, sólo si cumplen ciertos requisitos.
Gisel Chamblas, asesor tributario de Auditeris, destaca que “primero debe tratarse de sociedades de personas, pudiendo ser sociedades limitadas o colectivas civiles, quedando excluidas las sociedades anónimas, sociedades por acciones o en comandita por acciones”.
Además, “la actividad económica de la empresa deberá ser exclusivamente relativa a servicios y asesorías profesionales. Por otra parte, los servicios profesionales deben ser prestados por intermedio de sus socios, asociados o en colaboración de dependientes que contribuyan a la prestación del servicio”.
Otra consideración importante es que los socios deben ejercer sus profesiones para la sociedad, no siendo aceptable que uno o más socios solo aporten capital. Por último y según explica la experta tributaria, las profesiones de los socios deben ser idénticas, similares, afines o complementarias.
