En las oficinas de PwC Chile, la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) llevó a cabo una nueva sesión del Comité de Asuntos Corporativos. La presidenta del gremio, María Teresa Vial, inauguró la jornada destacando cómo la Cámara impulsa la confianza empresarial y fortalece la relación entre empresas, a través de iniciativas como las plataformas de comercio electrónico y espacios de colaboración que promueven el desarrollo económico.
El punto central del Comité fue la presentación del Estudio de Confianza 2025, elaborado por PwC Chile, en conjunto con la Facultad de Administración y Economía de la Universidad Diego Portales (UDP) y con la colaboración de la ACHS. La exposición estuvo a cargo de Renzo Corona Spedaliere, socio principal de PwC Chile, quien detalló las principales conclusiones de esta segunda medición en el país, que recoge simultáneamente las percepciones de directivos, colaboradores y consumidores.
Entre los hallazgos más relevantes, el 89% de los directivos, el 83,6% de los colaboradores y el 81,4% de los consumidores declararon tener alta confianza en la empresa en la que trabajan o con la que interactúan. Sin embargo, la diferencia entre la percepción de los directivos y el nivel de confianza declarado por colaboradores y consumidores alcanza brechas de hasta 53,3 puntos porcentuales. Asimismo, el estudio también mostró diferencias según género y edad: los hombres y las personas mayores de 45 años presentan niveles más altos de confianza, mientras que mujeres y quienes son menores de 45 años registran cifras más bajas. Por regiones, el norte del país —Antofagasta y Tarapacá— tiene los niveles más altos, en contraste con la Región Metropolitana, Ñuble y zonas del sur.
Otro aspecto relevante que se destacó es que los colaboradores y consumidores valoran acciones concretas para construir confianza, como la comunicación clara, la protección de datos personales y la transparencia en los valores y objetivos corporativos. Estas prácticas no solo fortalecen la relación con clientes y empleados, sino que también contribuyen a la reputación y sostenibilidad de las empresas en el largo plazo.
El estudio subraya que no todas las industrias están igualmente preparadas para enfrentar riesgos operacionales o asociados a la inteligencia artificial, siendo sectores como finanzas y consultoría los más preparados. Estos resultados refuerzan que la confianza es un activo estratégico que debe ser gestionado y protegido para garantizar la sostenibilidad de las empresas y fortalecer su vínculo con la sociedad.