La Cámara de Comercio de Santiago (CCS) califica de gravísima la denuncia de la Fiscalía Nacional Económica (FNE) sobre el supuesto delito de colusión de dos compañías de gases industriales, lo que habría ocurrido en plena pandemia y alerta sobre el daño que este caso podría ocasionar a la confianza y reputación empresarial.

“La comisión de delitos por personas que utilizan sus cargos públicos, estructuras societarias como fundaciones o empresas ha estado presente en el pasado, lo está en este momento y lo estará en el futuro. Esta constatación de realidad significa que estos hechos deben ser perseguidos con fuerza, castigados de forma ejemplificadora y comunicados profusamente, porque no pueden vencernos ni hacernos bajar nuestros estándares. Desde nuestro gremio, los condenamos fuertemente”, enfatizó María Teresa Vial, presidenta de la CCS.

Desde el gremio agregan que conscientes de la imposibilidad de erradicar en forma absoluta la comisión de delitos y crímenes de ninguna esfera de nuestra sociedad, cobran especial importancia dos aspectos en nuestro mundo empresarial: primero, la vigilancia permanente, no sólo mediante el cumplimiento normativo, sino a través de la generación de una cultura de probidad que nuestras empresas en Chile tienen que cuidar y celebrar, además de perfeccionar, para que cada vez existan mayores resguardos en contra de malas prácticas, delitos o crímenes.

El gremio subraya que es necesario ser justos con las personas y empresas que realizan su trabajo bien hecho, basado en buenas prácticas, en conformidad con la normativa y con el propósito de generar riqueza y contribuir a un crecimiento sostenible del país.

“Nos rebelamos con fuerza ante la idea de que delitos cometidos por muy pocos en el ámbito empresarial salpiquen a un sector que debe estar centrado en aportar al desarrollo del país y en generar lazos de confianza desde el trabajo bien hecho”, concluyó Vial.